En los últimos días muchos padres esperan con ansias y desesperación la apertura de las escuelas. Pero otros, han comenzado a evaluar la posibilidad de #educar a sus hijos fuera de la escuela o del sistema tradicional educativo. Aún a pesar de que muchos han tenido que experimentar una educación muy rígida en sus hogares por la necesidad de completar las extensas guías que las instituciones les han dado.

Las razones pueden ser varias: porque les ha gustado la experiencia que han tenido. Se han dado cuenta que sus hijos aprenden más o mejor. Evitan el tráfico, los chicos están menos estresados, etc. Al final no importa cuál sea la razón específica, lo importante es que han comenzado a valorar esa posibilidad.

Educar a nuestros hijos en casa (o #homeschooling) no significa que deban de hacer lo mismo que hacen en la escuela, significa que tenemos la oportunidad de construir la educación a la medida. De crear algo diferente con y para ellos.

En otras palabras, podemos escoger los objetivos que como familia queremos alcanzar, y a partir de ahí moldear o escoger el sistema o metodología que deseamos implementar. Pero es importante tener en cuenta que no es el sistema lo que nos dará el éxito, como lo dice Priscila Salazar, en su libro Aprendizaje Supraescolar, “El éxito no radica en los sistemas, dentro o fuera de la escuela. El éxito radica en saber hacia dónde vas y tomar todas las decisiones necesarias para llegar hasta allí.”1

Hay muchas maneras de educar en casa, un universo de posibilidades se abre frente a nosotros. El #desescolarizar a los chicos o chicas, nos permite encontrar quizá otras maneras de aprender más eficientes o más atractivas para ellos.

Aún recuerdo esas noches sin dormir, hace un par de años atrás, por la emoción que sentíamos de desescolarizar a nuestros hijos y moldear su #aprendizaje. Las preguntas, las inquietudes, la incertidumbre, y la alegría de leer y de encontrar algún rumbo a seguir. Fue y continúa siendo realmente apasionante.

Más que un sistema estándar a seguir, encontramos una herramienta para construir la educación. Donde los hijos se vuelven los propios actores de su aprendizaje y donde la unión o la interacción con ellos se vuelve más vital que una nota. Donde la autoconfianza, el respeto y el manejo de las emociones se pueden convertir en una materia.

No cambiaría jamás, esa decisión que tomamos de sacar a nuestros hijos de la escuela, desescolarizarlos y educarlos en casa.

Si eres de esos padres que han comenzado a evaluar educar a sus hijos en casa, y quisieras más información, guía o tienes un par de interrogantes rondando por tu cabeza, llámanos, con gusto te acompañaremos en este maravilloso proceso.

1 Salazar, PriscilaAprendizaje Supraescolar: Una perspectiva más allá de los paradigmas escolares, pág.13, 2013, México.

Por: Ethel Turcios. Directora y Creadora de #ÁrbolDeVida